Primer mes completado, el
balance sin lugar a dudas es positivo, tal vez hubiera deseado hacer mas
kilómetros, mas horas de entrenamiento, mas desnivel, pero teniendo en cuenta
que partía de cero por la lesión me doy por satisfecho...
Las piernas están
respondiendo, los plazos de recuperación entre una sesión y otra son buenos,
aunque bien es cierto que no descuido el descanso. Me llama la atención la
diferencia de sensaciones dependiendo la franja horaria, las salidas por la
tarde noche, después de la jornada laboral, cuestan lo indecible. En cambio la
salida del fin de semana, siendo un entreno más cañero, noto que todo fluye.
El martes de nuevo en los
montes de Batres, ya me conozco todos los baches, las trialeras, las
madrigueras de los conejos, creo que voy a empezar a ponerles nombre. Buen
entreno el de hoy, continuos sube baja, trotando cuando se puede, sufriendo en
las subidas y volando en las bajadas. La guinda al pastel, es la última megacuesta
de dos kilómetros que la subimos corriendo. Subidón en toda regla, primero de
pulsaciones y después de ánimo. Al final se nos hace de noche, un par de
cervezas para celebrarlo y para casa…