Maratón Sevilla…. No pudo ser…

Pues no, no ha podido ser, el Sub-3:20 tendrá que esperar, hasta el km 16 estuve coqueteando con el globo de las 3:15… Si tuviera que definir mi estado físico y mental durante esos primeros kilómetros... Feliz sería una palabra pequeña para albergar todas esas emociones y sensaciones vividas, sólo por eso ya ha merecido la pena correr el maratón.

A pesar de no haber hecho marca, éste maratón ha sido el de los records, el de mis records particulares, ha sido:

En el que más he entrenado.

En el que más me ha costado entrenar.

En el que más ganas e ilusión he sentido.

En el que más compañeros y amigos he visto y conocido.

En el que más nervios he pasado, la experiencia de los anteriores maratones no sirve, los nervios están y estarán siempre.

En el que más he rezado durante la carrera pidiendo no romperme y poder terminar. Sí, lo sé el plan era retirarme si había problemas, hay vida después del maratón, y yo lo que quiero es seguir corriendo. La estrategia de carrera se diseña sentado y con la cabeza fría, y en ese momento estaba corriendo y con la cabeza caliente, así que “palante”.

En el que más impotencia y frustración he sentido, porque malo es no poder cuando las piernas no van, pero peor aún es tener fuerzas y no poder correr por una lesión.

En el que más dolor físico he sufrido,  de largo y con mucha diferencia.

En el que más esfuerzo he realizado.

En el que mayor desilusión me he llevado, por que el Domingo era el día, lo sé, lo supe desde el principio, temperatura y humedad perfecta, sin aire, sin lluvia, con el asfalto totalmente plano, con las calles llenas de publico aplaudiendo a nuestro paso, en definitiva, con todo de cara… el dolor que se alojó en el gemelo en el kilómetro 16, venia con premio sorpresa: toneladas de desilusión.

El maratón en el que más ira y rabia he acumulado.

El maratón en el que más rápidamente decidí que volvería a intentarlo (no hizo falta cruzar la línea de meta, en el km 21 ya lo tenía claro y totalmente decidido).

Sí, el 3:20 tendrá que esperar, pero a pesar de no haberlo logrado, algo ha cambiado dentro de mí, a pesar de no conseguirlo, se han disipado todas las dudas sobre si sería capaz de lograr el objetivo, ahora sé que con esfuerzo, pasión y constancia puedo conseguirlo…

El tiempo final 3:26:06

Según pasan los días voy valorando lo conseguido, no el tiempo pero si el esfuerzo pues considero que ha sido el máximo, la frustración de los primeros días se va tornando en satisfacción y la ira en sosiego. A su vez la desilusión se difumina con la misma fuerza y velocidad con la que las nuevas ganas van depositándose en mi cuerpo y que voy guardando desde ya, para cuando venga el siguiente.

Gracias por todo Maratón, esta vez me has vencido, como siempre un verdadero placer volver a enfrentarme a tu dureza, ha sido un honor luchar contigo, volveremos a vernos pronto no lo dudes, cuando sane mis heridas retornaré los entrenamientos y lo haré con más constancia, con más fuerza, con más tesón, y regresaré más fuerte, más rápido, más resistente, no te quepa la menor duda amigo…

Cuando reúna fotos y ponga en orden todas las ideas y pensamientos….. crónica al canto.